
Del latín Homo, ser animado racional, individuo que tiene las cualidades consideradas varoniles por excelencia, como el valor y la firmeza. Con estas cualidades RAE, la Real Academia Española, define al Hombre, y desde ese punto de vista se puede continuar, que sería de nuestra vida sin ellos, los hay de todo tipo, altos, chicos, flacos, gordos, pelados, peludos, blancos, negros, amarillos, hasta verdes, inteligentes, tontos, fuertes, débiles, sensibles, insensibles, tiernos, sinceros, fieles, infieles, buenos amantes, buenos maridos, trabajólicos, seguros, inseguros, capaces, incapaces, sabios, tolerantes, intolerantes, pesados, livianos, curiosos, copuchentos, hediondos, ricos, deportistas, haraganes… Y podría seguir enumerando cualidades favorables y desfavorables de su género, pero la cuestión es la siguiente, desde que poblaron la tierra su evolución a través de los años ha sido satisfactoria, pero sin duda, el convivir con ellos es la mejor experiencia, ánimo mujeres ellos tampoco pueden vivir sin nosotras, no sobrevivirían sin nuestro apoyo, amor y cuidados…